Con motivo de la celebración de UNIGOLF, Jon Rahm ha atendido a los medios de comunicación, desde Arizona, por medio de una vídeo-conferencia que ha tenido lugar en la Sala de Prensa de IFEMA y ha sido retransmitida a través de streaming.
Jon (Barrika, Vizcaya, 11-10-1994) ocupa el puesto 13 del Ranking Mundial, es cuarto en la FedEx Cup y tercero en la Carrera a Dubái. Ha superado 21 cortes de los 23 torneos que ha disputado en el PGA Tour, en el que suma nueve Top ten y se ha situado en 15 ocasiones entre los 25 primeros; en enero se proclamó campeón del Farmers Insurance Open en San Diego; ha sido dos veces segundo (WGC Dell Technologies Match Play 2017, jugó la final contra el número uno del mundo, Dustin Johnson; RBC Canadian Open 2016) y tercero en dos torneos.
Jon Rahm: “Antes de empezar quería mencionar dos cosas. En primer lugar, me gustaría dar las gracias a UNIGOLF y a IFEMA por ayudar a hacer esto posible. Lo segundo es que ya es oficial, pues se lo he dije a Sergio García, que voy a jugar el Andalucía Valderrama Masters. A no ser que físicamente me lesione, esperemos que no pase, lo juego seguro”.
Sobre los problemas en la última vuelta de Augusta…
“Ese día no era para mí. Era todo para Sergio. Yo creo que fue sobre todo fatiga. Después del match-play el viaje a Houston no fue lo más organizado ni lo más inteligente, ya que fuimos en coche en un día muy largo y yo creo que mi cuerpo no dio para más. Una semana de Grande es una semana muy intensa estando con ciertas posibilidades de hacerlo bien, y en los últimos hoyos, a partir del 16, mi cuerpo no daba para más. El 18 se me hizo eterno. Pegué el drive, le pegué bien pero cogí el búnker y, a partir de ahí, con el segundo golpe ya casi no daba abasto. Básicamente fue por fatiga, cansancio físico y mental… aunque esto me vendrá bien para saber que antes de estas semanas necesito unos días más de descanso”.
Sobre la imagen del Jon Rahm que se ha construido a partir de los artículos publicados…
“Desde Torrey Pines ha habido algún que otro artículo, pero no los he leído todos. Cada vez que llego a los torneos intento no mirar las redes sociales ni los artículos porque siempre va a haber alguno que no sea el más agradable y no quiero que afecte a mi juego. De momento, todo lo que he leído ha sido muy cercano a cómo me veo yo y muy acertado. Respecto a ese tema estoy bastante contento”.
El futuro inmediato de Jon Rahm…
“Los que habéis hablado conmigo más de una vez sabéis que yo soy muy optimista y aspiro a metas muy altas. Tengo objetivos muy altos, de los que prefiero no hablar, pero me veo bien y cómodo. He hecho lo que he hecho de manera muy rápida y no me esperaba ni yo clasificarme para todo lo que me he clasificado, pero me veo con muchas posibilidades este año de seguir jugando igual de bien y de ganar otro torneo. Estaría muy bien, aunque lo que he hecho ya es suficiente. Todavía quedan tres Grandes más, un campeonato del mundo, la FedEx Cup, algún torneo que juegue en Europa… Todavía queda mucho y tengo ganas de seguir jugando igual”.
Sobre las decisiones de calendario y las posibles limitaciones…
“Ahora más que nunca yo decido sobre mi calendario. Cuando me hice pro había que jugar torneos para sumar puntos y ascender en el ranking mundial, pero ahora todo depende de mí, lo que yo quiera o no quiera jugar. Obviamente, me dejo aconsejar por los que saben más que yo, ya que aún no he jugado una temporada completa en el PGA Tour, pero la decisión es mía.
Evidentemente, ha habido un cambio drástico. Desde que conseguí la tarjeta hasta que gané en Torrey Pines jugué muchos torneos sin demasiado descanso porque era lo que hacía falta. Después de ganar en Torrey Pines no jugué en Riviera y luego jugué solo dos torneos en cinco semanas para descansar. Ahora me he tomado esta semana y la que viene de descanso, y voy a limitar el número de torneos. Hay mucha gente de mi edad que peca de jugar demasiados y se cansa. Ahora mismo estoy jugando menos que otros, pero intento ir a los campos que me llamen más la atención. De aquí al US Open no voy a jugar más de dos semanas seguidas. Cada vez juego menos, para que cuando llegue el final del año, con todos los torneos importantes, esté más descansado”.
Sobre un posible saque de honor en San Mamés…
“No sé si habría algo mejor a lo que aspirar que un saque de honor en San Mamés. Sería un gran honor para mí, aunque espero que no me lo pidan antes de ganar un Grande o llegar al número uno del mundo. No voy a decir que lo veo pronto, porque ganar un Grande no es ninguna broma, y ya os lo puede decir Sergio, pero espero que sea más pronto que tarde. Solo he jugado tres Grandes en mi vida y es muy pronto. Ni siquiera Tiger lo hizo. Tiger jugó diez Grandes antes de ganar el primero. Todavía me queda mucho que aprender. Esperemos que pase pronto, pero con que pase me conformo”.
Sobre sus conclusiones posteriores al Masters…
“El Masters es un Grande algo diferente al resto. Es el que tiene los greenes más grandes y más rápidos, y las calles son las más anchas. En el US Open, el British y el PGA las calles son más estrechas, el rough está muy alto y los greenes muy duros. En Augusta es un poco al contrario. Los greenes últimamente han estado algo blandos y las calles también, además de ser generosas y no haber casi rough. Por eso es complicado llevarse algo del Masters a los siguientes Grandes. Lo que he dicho siempre que tengo que aprender: yo soy un jugador agresivo y el PGA Tour me viene bien porque puedo serlo y hay que hacer birdies, pero en los Grandes hay que tener mucha paciencia. Ya en Oakmont, cuando quedé en el top 25, hice más birdies que Dustin Johnson, y yo creo que me ganó de doce golpes. En los Grandes no todo es hacer birdies, porque todos los hacemos, sino eliminar los números abultados. No sé si hice dos o tres dobles bogeys y un triple en Augusta, y alguno de los dobles bogeys fue sin golpe de penalidad, lo cual no es bueno, incluido el triple del 18. Eso quiere decir que algún fallo mental has cometido. En esos hoyos cometí errores que no tenía que haber cometido y tenía que haber sido más inteligente. No sé si fue por una estrategia demasiado agresiva, un putt mal tirado o simplemente por mala suerte, aunque cuatro veces en una semana no pasa solo por mala suerte. Especialmente el hoyo 10, donde el segundo día hice doble bogey estando justo a la izquierda de green con un approach relativamente fácil. Son cosas que se podían haber evitado, aunque es el Masters y no es ninguna tontería. Sé que tengo capacidad para hacer birdies, pero el número de bogeys debería haber sido menor”.
Sobre sus motivaciones…
“Llegar a número uno o ganar un Grande algún día es lo que me motiva. Soy un enfermo del golf, un enamorado del golf, y el hecho de pensar en ponerme la chaqueta verde o levantar el Wanamaker, la jarra de clarete o el trofeo del US Open es algo que me motiva día a día. No soy difícil de motivar. Me motivo fácilmente porque me gusta ir al campo entregado a lo que voy a hacer. Que haya ganado Sergio en Augusta ha hecho que esa semana quiera ganar aún más. Los referentes de cada era (Seve, José Mari, Sergio) han ganado y si yo me considero referente de una nueva era quiero ser el cuarto que gane. Si gana alguien antes que yo, como Rafa Cabrera-Bello, no me voy a enfadar y ojalá gane, pero me encantaría unirme a ese grupo de grandes jugadores españoles que han ganado el Masters. Si gano otro Grande me haría la misma ilusión, pero ver a Sergio ganar de la manera en que lo ha hecho, esas imágenes motivan para seguir trabajando y tener la misma alegría que él sintió en el 18”.
Sobre sus expectativas para Valderrama…
“Solo he jugado una vez en Valderrama y fue hace seis años. Mi juego ha cambiado bastante desde entones. Es un campo en el que no puedo pegar al drive a mi gusto porque es bastante estrecho y hay que meter la bola en la calle. Es un campo estratégico en el que los golpes hacia green van a tener mucha importancia. Son greenes pequeños y complicados y hay que ser muy preciso. Habrá que ser paciente y esperemos que no haga mucho viento, porque en Valderrama con viento es imposible. Ya se vio la última vez a Andrew Johnstone ganar con uno sobre par. No es un campo fácil en las condiciones más fáciles, y si sale viento será complicado.
Espero jugar bien para vosotros y todos los que vayan al torneo. Me hace mucha ilusión porque nunca he jugado un torneo profesional en España. Es un campo que me gusta mucho porque es muy divertido y todo un reto, y a mí me encantan los retos. Esperemos que tenga cuatro buenos días esa semana”.
Sobre lo que les diría a quienes quieran acercarse a apoyar el golf…
“Que se den prisa para ser los primeros en apoyar el golf en España. Si Sergio, o yo, o Rafa, u otros grandes jugadores en el European Tour siguen creciendo, van a tener que pegarse para ser ese sponsor, para ayudar al golf en España. Además, van a tener el orgullo de decir que fueron los primeros en apoyar de nuevo al golf en España y será bonito para ellos estar vinculados con algo así”.
El golf es un deporte increíble, con una integridad y unos valores impresionantes, y poder relacionarse con algo así es bueno para las empresas. Mi mensaje es que se den prisa y que apuesten ahora antes de que sea demasiado tarde”.
Sobre su conversación con Thomas Björn (Capitán del equipo de Europa 2018) y su calendario en Europa…
“No pude hablar mucho con Thomas. Le vi solamente un día de camino a la cancha y hablé con él cinco minutos. Lo mismo que la última vez, quedamos en que, si teníamos tiempo, nos veríamos para comer o cenar para hablar. Sé que habló con otras personas de mi entorno y lo único que les dijo es que yo disfrutase de este año y el que viene, que si sigo jugando así la Ryder Cup llegará. Que no pierda el tiempo en pensar solo en la Ryder, que disfrute y que siga jugando al golf de la manera en que lo estoy jugando. Que me lo pase bien, que la Ryder Cup llegará seguro.
Con respecto al calendario de Europa, no lo sabemos todavía. Obviamente juego el British y el Andalucía Valderrama Masters, pero no sabemos todavía qué torneos jugar antes o después. Lo estamos mirando y en cuanto lo sepamos lo anunciaremos, aunque no hay nada finalizado.
Sobre lo de ir a por la FedEx y la Race to Dubai, está claro. Ahora mismo estoy en el top 4 en las dos y, si hay opciones —obviamente la FedEx termina mucho antes que la Race to Dubai— sí, iré a por las dos. Sé que la Race to Dubai será más complicada porque voy a jugar torneos en Europa que son algo diferentes a los que estoy jugando, pero es mi objetivo. No sé si hay algún novato que haya ganado una de las dos, pero sería un bonito sueño. Hasta hace poco no sabía que Seve era el único español que ha logrado la Race to Dubai. Sería algo increíble que Sergio y yo sigamos ahí arriba y al final del año estemos luchando por la victoria”.
Sobre la paciencia necesaria hasta ganar un Grande…
“Si voy a ganar un Grande, preferiría no esperar, como todos, pero no me importaría. Si tuviese una carrera como la que ha tenido Sergio estaría satisfecho, ya que se le considera uno de los mejores del mundo y de la historia. Es uno de mis grandes ídolos, ya lo era, y ahora más por haber cerrado muchas bocas. No me importaría esperar. Siendo sincero, he tenido la suerte de cumplir muchos objetivos a velocidad bastante rápida, ganando torneos antes de lo que esperaba, empezando por Campeonatos de España ganando el junior cuando solo era un cadete, ganando el absoluto dos veces seguidas… pero si hay que esperar a un Grande, porque un Grande es muy especial, yo esperaría. Esperaré lo que haga falta”.
Sobre si se siente decepcionado al quedar 27º en el Masters…
“Sí, totalmente. Muy decepcionado. Creo que los días de viento hubo pocos jugadores que jugasen de tee a green mejor que yo y simplemente fallé un par de putts, y luego el sábado llevaba la vuelta controlada, ya que iba tres abajo en el tee del 12, jugando increíble, casi sin ningún fallo, pero esa bola del 12 me hizo daño. La conclusión es que del 1 al 15 de Augusta los jugué bien, aunque algún error siempre se comete ya que el 12 es muy difícil, pero del 16 al 18 los jugué bastante mal todos los días. El único día que no hice bogeys fue el sábado, tuve la oportunidad de hacer birdies pero no estuve ni cerca. De los que estaban ahí arriba esos hoyos los he jugado peor que nadie. Por otro lado, esos últimos hoyos no los había jugado nadie mejor que Sergio, así que ahí está la diferencia. Si todos los días voy mal y acabo con dos o tres birdies, todo es diferente, pero haberlo hecho todo bien antes y no terminar como yo quería siempre decepciona”.
Sobre el control sobre su temperamento…
“Desde pequeño siempre he tenido problemas con mi genio y algunos lo sabéis mejor que nadie, pero desde que vine a EE. UU. y desde que me he hecho profesional no he tenido ningún problema. Sí que perdí la paciencia, por frustración más que nada y por errores mentales, hice lo que hice y me arrepiento muchísimo, y pido perdón de nuevo a Augusta. Hay que saber controlar en todo momento. Llevo los últimos seis o siete años trabajando muy fuerte para intentar controlarlo y es difícil por mi carácter competitivo. Habrá momentos en que se me vaya, aunque espero que no me vuelva a suceder. Quitando esa parte de la semana, el campo me encantó porque ayuda mucho a la gente creativa y a mí me gusta utilizar la imaginación para crear golpes diferentes con los que dejar la bola cerca del hoyo. Tengo que seguir aprendiendo porque cada día veía nuevas opciones de dónde poner la bola para tener los mejores putts para birdies y me pareció muy divertido. No pensaba que fuera a “aprochar” bien y cada vez que fallaba el green estaba casi contento por lo confiado que estaba. Solo metí un approach, puede que el más difícil que tuve esta semana, pero estuve cerca varias veces y me pareció muy divertido cómo el planteamiento del campo ayuda a la gente a pensar diferentes golpes. Casi como el golf en links, pero en condiciones extremadamente más rápidas, lo cual lo hace mucho más fácil para usar la creatividad y crear diferentes golpes. Eso me encantó”.
Sobre el papel de Tim Mickelson y su equipo…
“El papel de Tim Mickelson es fundamental. Es quien organiza todo y el que me mantiene a raya para que no me salga del carril. El equipo consta de Eduardo Celles, Joseba del Carmen, mi preparador físico que se llama Spencer y luego dos fisios que son diferentes: Jimmy Yuan y Harry. Harry es el que viaja conmigo porque Jimmy tiene bastante trabajo con otros deportistas y tienen diferentes técnicas. Harry me ayuda a calentar y relajar y me mantiene en forma durante el torneo, mientras que Jimmy hace acupuntura y trabaja mucho con técnicas orientales, además de ayudarme a recuperar cualquier posible lesión. Y obviamente está Adam Hayes, mi caddie, que es quien más me ha ayudado por la gran experiencia que tiene y por lo bien que sabe llevarme por el campo y decirme lo que tengo que jugar, cómo jugar, y cómo me dice lo que tiene que decirme en cada momento. No tiene miedo, y se vio varias veces en Augusta, a pararme aunque esté puesto a la bola y a poner en duda mi estrategia o el palo que vaya a pegar, pero siempre respetándome. Y el 99,99% de las veces me ayuda a tomar la decisión correcta. El mejor ejemplo, Torrey Pines. Del hoyo 10 en adelante, en un campo complicado, al ver que estaba jugando tan bien me dijo que me fuese a por todas las banderas que quedaban, que daba igual. En el 18 me dijo: “al hoyo, vamos a hacer birdie, cien por cien”. No sé cuántos caddies, a 215 metros de bandera, desde un búnker a un green que no es fácil le dirían al jugador sin dudarlo “coge este hierro y pégale”. Pocas veces me para, porque somos muy agresivos los dos, pero es un caddie que me complementa muy bien y el que más me ha ayudado hasta ahora”.
Sobre la gestión de la presión…
“Como hicieron los dos grandes dominadores del golf, esa presión, esa competitividad que tenemos, es lo que hace que saquemos el buen juego al final. No siempre me ha salido todo como quería. Como en los dos últimos campeonatos del mundo, estando para ganar. En México fallé un par de putts cortos, en el match-play me salió el tiro por la culata en la primera mitad, y aunque casi tuve la oportunidad de ganar al final fallé. En esos momentos no estaba pensando en la presión. En Congressional estaba pensando en ganar. Les dije a Tim y a mis padres que yo no quería pasar cortes para conseguir la tarjeta, sino ganar, jugar la FedEx Cup y hasta la Ryder Cup si era posible, pero es lo que tenía en mente. Aspiré tan alto que me parecía haberme quedado corto al sacar la tarjeta. Estoy tan mentalizado en lo que quiero que el futuro y el pasado no existen. En Torrey Pines, una vez que metí el putt del 13 mi mente se fue a un estado de calma para seguir haciendo birdies y no pensé en quién iba delante ni detrás, sino que me metí en mi propio mundo y me puse en automático”.
Sobre si cambiará su actitud agresiva en el US Open…
“Intentaré siempre ser fiel a mí mismo. Se puede ser agresivo con otra línea o actitud conservadora. Se puede elegir un palo más conservador y mantener la actitud agresiva, aunque no esté pegando a bandera, y eso es lo que tengo que aprender. Puedo seguir pensando en agresivo con swings agresivos, pero saber dónde tengo que poner la bola es lo más importante esa semana. En otras semanas, en el PGA Tour, puedes dejarla en cualquier lugar y vas a tener una opción asequible de birdie con approach y putt. En un Grande a veces vas a rezar para hacer dos putts o para que tu approach quede a menos de cinco metros de bandera. No conozco el campo, he visto que es más links que otras sedes del US Open, y no sé si se me verá como un remanso de paz, aunque tampoco es como soy. Intentaré ser yo. Como me dijo Chema, con sangre fría pero agresivo”.
Sobre sus sensaciones en el día a día…
“Lo que tengo en mente es ganar. He hecho las cosas muy rápido, pero me lo estoy pasando tan bien y es tan divertido, que por qué parar. Cuando me tomo unos días de descanso llevo vida normal y no hago nada especial, ni me paro a pensar en velocidades ni en lo que he hecho ni voy a hacer. Si lo que he hecho hasta ahora me ha llevado a estar donde estoy, por qué iba a cambiarlo”.
Sobre los ánimos que puede dar a los chavales que se inician…
“Sería una alegría poder ayudar a niños pequeños a jugar este deporte. Gracias a lo que hicieron Seve y Emma Villacieros en el 97 yo juego al golf. No sé si necesitamos otra Ryder Cup u otro referente, pero sí que puede ayudar. No sé qué le diría a un niño exactamente, porque cada persona es diferente. Que lo pruebe. La inmensa mayoría de los que jugamos al golf lo odiábamos cinco minutos después de conocerlo y es difícil competir con el fútbol en España. No obligaría a ningún niño y me gustaría que lo hiciese por su cuenta. Le diría que es un deporte muy divertido y que hay pocos deportes que te dan la oportunidad de jugar con otras tres personas o tú solo y ser igual de divertido y competitivo. El golf ofrece muchos valores a los jóvenes, como integridad, valor y honestidad, y vale la pena probarlo. Y si es un niño muy pequeño, que coja un palo, le pegue lo más fuerte que pueda y se divierta”.
Frases sueltas...
“Jordan Spieth me dijo que tardó casi dos años en tener amigos en el PGA Tour, espero que yo tarde algo menos”.
“He analizado qué pasó en el match play, pasaron tres cosas: el golf, un poco de impaciencia y Dustin Johnson. En el uno y en el dos le tenía entre las cuerdas, si llego a meter alguno de los dos putts... Pensaba que iba a ganar, incluso yendo cinco abajo”.
“Un gran orgullo pensar que yo, un chaval de 22 años pueda influir a gente que casi ni siquiera juega al golf a seguirme, como me cuentan, es un gran orgullo. Quiero llegar a lo más alto para animar a la gente a jugar al golf y que se diviertan con este deporte”.
“Mi partido ideal sería con Seve (Ballesteros), Jack (Nicklaus) y Ben Hogan”.
“Cuando me comparan con Seve... es un orgullo tremendo. Severiano es para mí el más grande. Me hace mucha ilusión pero, como he dicho muchas veces, yo no soy Seve ni pretendo serlo, él era único”.
“Claro que echo de menos España, quién no, por eso tengo muchas ganas de jugar en Valderrama. Echo mucho de menos la comida. Me encantan los chuletones, las lentejas y las alubias; la carne aquí se puede comer parecida pero las alubias y lentejas como las prepara mi ama... aquí no las hay”.
“Ganar a Messi y compañía es muy complicado. Meterle 4 al Barça no fue fácil. Parte de mi carácter es el del Athletic, esa pasión, ese carácter luchador, ante la adversidad no darse por vencido”.
“Hace poco, Phil Mickelson le dio las gracias a Tiger por lo que ha hecho por el golf, imagínate lo que significa para jugadores como yo. Elevó el nivel del golf hasta donde está ahora, en su día lo hicieron Palmer y Nicklaus. Un gran competidor, para muchos es el mejor de la historia, nunca se sabrá si Tiger o Nicklaus. Ha batido casi todos los records del mundo del golf. Como digo de Seve, no pretendo ser Tiger pero siempre se pueden aprender cosas de él”.