A las 8:15 de la mañana se retomaron todos los partidos que en la jornada anterior se vieron obligados a suspender por la falta de luz y dos horas después la final estaba servida con sus respectivos emparejamientos.
En la jornada dominical las condiciones climáticas fueron bastante buenas para la práctica del golf, con un tiempo soleado y apenas algo de viento que no influyó en el juego de los jóvenes.
De la jornada cabe destacar el exiguo séptimo puesto cosechado por la selección de Valencia, que acudía con la vitola de favorita a alzarse con el triunfo. Pero el mejor enfrentamiento lo protagonizaron las selecciones clasificadas en primera y segunda posición, Asturias y Navarra; durante todo el recorrido se mostraron a un grandísimo nivel y con ansias de hacerse con el título y, si bien Navarra parecía encaminada a reeditar triunfo en este campeonato, los asturianos embocaron un putt de doce metros en el hoyo 17 que dejó sin capacidad de reacción a los locales.
El balance de este Gran Premio MAPFRE es muy positivo, donde el gran éxito organizativo se une a las excelentes condiciones de juego mantenidas a lo largo de las tres jornadas en el joven campo de Gorraiz.