Acabó soltando más de una lágrima y recordando a su madre, recientemente fallecida, a quien, obviamente, dedicó su triunfo, un triunfo basado en la experiencia y en la veteranía de una jugadora de 44 años, profesional desde 1983, que con casi toda seguridad abandonará el Circuito Femenino al término de la temporada y que no conseguía una victoria –seis en su carrera con ésta de Salamanca– desde hacía 7 años. La italiana Federica Dassu, protagonista principal de esta historia, apuntaló su victoria en el último hoyo mediante dos putts precisos que escondían los nervios que recorrían su cuerpo. La malagueña Ana Belén Sánchez, segunda a la postre, acarició por su parte un título que se le escapó por el margen izquierdo de la calle de ese mismo hoyo 18.
Terreno endiablado
La veteranía tomó cuerpo desde la primera jornada, un toma y daca continuo entre las jugadoras en el que también participó de manera más activa de lo inicialmente previsto el campo de golf de Salamanca, en apariencia poco complicado pero en la práctica un endiablado terreno en el que se convirtió en obligatorio aplicar trayectorias rectilíneas desde los tee de salida porque, en caso contrario, el ‘rough’ actuaba de trampa mortal.
La australiana Corinne Dibnah y la italiana Federica Dassu, con muchos años de experiencia a sus espaldas, fueron quienes salieron más indemnes de semejante reto durante los primeros 18 hoyos, anotando unos inalcanzables 67 golpes en el marcador. Sólo algunas españolas aguantaron el envite (Ana Larrañeta, Ana Belén Sánchez, Marta Prieto...), mientras otras de gran renombre y calidad contrastada, como Paula Martí, hubieron de esperar hasta la segunda vuelta para confirmar su juego.
De hecho, la barcelonesa, minada por unos 77 lacerantes golpes en la primera jornada, reaccionó con brío –68 en la segunda– para convertirse, por un día, en una de las jugadoras determinantes de la competición, porque el tercer recorrido, para su desgracia, tenía reservado para ella toda una serie de dificultades crecientes que la enviaron de nuevo a la parte media de la clasificación.
Curiosamente, como si la competición propiamente dicha no fuera de por sí un habitat hipercompetitivo, los caprichos de la naturaleza se inmiscuyeron en la parte final del segundo recorrido para añadir dosis de complicación que, a la mayoría de las participantes, le generó problemas adicionales. Igual que doce meses antes, en una mimética repetición que refrescó a todos la memoria, una tormenta y su consiguiente aparato eléctrico, a la misma hora y en el mismo lugar, descargó en las inmediaciones del campo de golf de Salamanca, obligando a suspender momentáneamente el juego.
Protagonismo renovado
El parón, de casi hora y media, enfrió los ánimos y el ritmo de muchas, dejando en bandeja el liderato, por segundo día consecutivo, en manos de la australiana Corinne Dibnah. Las españolas, algo descolgadas, tomaron sin embargo renovado protagonismo al término de la tercera jornada, todo por obra y gracia de la donostiarra Marina Arruti, que con 67 golpes se distinguió como la mejor en una vuelta en la que fueron contadas con los dedos de una mano aquellas que rebajaron el par del campo, entre ellas la malagueña Ana Belén Sánchez, quien, agazapada, tacita a tacita, mantenía vivas todas sus opciones.
Un viento racheado previo a otra tormenta que esta vez descargó con la jornada concluida ejerció de verdugo para muchas, pero no para la francesa Virginie Auffret, que asumió el liderato por primera vez en su carrera deportiva. La gala era, pues, supuestamente, el verdadero objetivo a batir, con Marina Arruti fenomenalmente instalada en la tercera plaza a 4 golpes y con Ana Belén Sánchez, quinta a 5 golpes, igualmente al acecho.
Quedaban 18 hoyos por delante y, como se presumía, una jornada de auténtico infarto de por medio en pos de un título al que renunció a media tarde, producto del habitual mal de altura, la francesa Auffret, víctima de dos ‘dobles bogeys’ consecutivos. Marina Arruti, griposa, resbaló igualmente de la parte más alta de la clasificación, un hueco que ocuparon de inmediato Federica Dassu y Ana Belén Sánchez, dos grandes jugadoras que siguieron caminos distintos en el hoyo decisivo. Dassu, rectilínea, llegó sin complicaciones al green del 18, mientras que Ana Belén completó todo el recorrido fuera de calle víctima del único drive erróneo –qué lástima– de toda la jornada.
Resultados
1.- Federica Dassu (Italia) 282 (67+73+72+70)
2.- Ana Belén Sánchez (España) 284 (71+73+69+71)
+.- Sophie Sandolo (Italia) 284 (72+70+71+71)
+.- Corine Diván (Australia) 284 (67+71+73+73)
8.- Marina Arruti (España) 287 (73+72+67+75)
18.- Carmen Alonso (España) 291 (74+75+72+70)
+.- Nuria Clau (España) 291 (75+70+73+73)
25.- Laura Cabanillas (España) 292 (73+77+72+70)
31.- María Hernández (España) 293 (76+71+72+74)
+.- Alexandra Armas (España) 293 (73+74+70+76)
42.- Ana Larrañeta (España) 295 (71+75+80+69)
48.- Paula Martí (España) 296 (77+68+77+74)
+.- Marta Prieto (España) 296 (71+76+74+75)
55.- Xonia Wunsch (España) 297 (76+71+75+75)
64.- Adriana Zwanck (España) 301 (75+75+77+74)
70.- María Martín (España) 307 (74+75+79+79)