Regla Local Modelo para limitar la distancia de los golpes a través de la bola

El R&A y la USGA se han propuesto abordar la tendencia del aumento de las distancias de los golpes de salida y el alargamiento de los campos que, en su opinión, amenazan la sostenibilidad a largo plazo del golf y socavan el principio básico de que un conjunto amplio y equilibrado de habilidades para el juego debe seguir siendo el principal determinante del éxito en el golf y garantizar que la distancia no se convierta en predominante en el equilibrio de las habilidades requeridas en el golf.

Por este motivo, el R&A y la USGA han propuesto una Regla Local Modelo (RLM) que ofrece a los organizadores de las competiciones la opción de requerir el uso de bolas de golf probadas en unas condiciones de golpeo modificadas.

Esta RLM está destinada a ser utilizada sólo en competiciones de élite y no tendrá ningún impacto en el golf amateur, caso de ser implementada.

El anuncio de esta RLM propuesta, aún en fase de estudio, se ha enviado a los fabricantes de equipos de golf, siguiendo los procedimientos de reglamentación de los equipos establecidos por los órganos de gobierno del golf. Caso de ser aprobada, esta RLM entraría en vigor en enero de 2026.

Las bolas de golf que se ajusten a esta RLM no deberían superar el límite actual de 290 metros (317 yardas) en unas condiciones de golpeo determinadas.

Todas las demás bolas, incluidas las utilizadas habitualmente por los jugadores de golf amateur con velocidades de swing más bajas, seguirían siendo probadas utilizando las actuales condiciones existentes.

Según informan los órganos gestores, en los últimos 20 años la distancia ha aumentado una media aproximada de un metro por año. Con esta medida, se espera que se reduzca la distancia de los golpes de salida en unos 13-14 metros de media para los pegadores más largos, capaces de golpear la bola con velocidades de cabeza de palo más altas.

Los resultados de una amplia investigación – contenidos en el informe Distance Insights – muestran, entre otros, que la tendencia general de los campos de golf a ser más largos tiene consecuencias adversas, incluyendo el aumento del coste y el tiempo para jugar, limitando el avance de los esfuerzos de sostenibilidad y reduciendo el desafío de los campos, y en algunos casos creando un riesgo de que se vuelvan obsoletos.

Por último, señalar que el Informe Anual de Distancias de Golpeo, también refleja un aumento medio interanual del 4 por ciento en la distancia en los siete circuitos, con todos menos el Japón Golf Tour y el LPGA Tour informando de unos valores obtenidos más. El Korn Ferry Tour registró la media anual de golpes más alta de todos los circuitos en 2022, con 281 metros.